martes, 29 de noviembre de 2011

LA AMISTAD.




La importancia de los amigos.


La vida transcurre y por diferentes circunstancias, esta va cambiando, te lleva a diferentes lugares y acabas residiendo no siempre donde deseas, pero es allí donde debes hacer tu vida. En ese lugar tratas de formarte un hogar, con unas condiciones que te hagan lo más feliz posible, con gente que escoges como amigos, con diferentes vecinos y con un entorno lo más favorable posible a tus necesidades.

Dentro de todo eso, suele faltar algún elemento importante que siempre te hace un poco “infeliz” en los momentos de añoranza. En ese grupo de elementos que pueden provocar esa añoranza podemos meter más o menos cosas: tu localidad de nacimiento, tu grupo de infancia, tus amigos, tus pasiones y lo que tal vez sea y es mas importante,- la familia-.

Pues de todos ellos me gustaría reflexionar sobre los amigos y la amistad forjada a lo largo de los años y de las diferentes vivencias acaecidas a lo largo de los años.



No hace mucho, alguien de mi entorno actual decía: “en la vida van pasando los amigos, unos se quedan y otros están de paso”. Y cierto es que no siempre puedes (y a veces ni te apetece) mantener el contacto con todos aquellos que a lo largo de las experiencias vividas representan a esos amigos que (como decía mi “amigo del presente”) son de los que percibes que están de paso.

Este tema me surge porque, por suerte, soy de los que tiene la suerte de tener muchos amigos (y no digo conocidos) en diferentes lugares donde pude trabajar y residir. Esos amigos te llenan el día a día, te ayudan en diferentes ocasiones y te permiten disfrutar de grandes momentos de diversión e intimidad, pues acaban compartiendo tus diferentes sentimientos y tus fiestas.

Pero de todos los amigos que puedas ir añadiendo a tus círculos de amistad, hay algunos que siempre quedan en lo más profundo del corazón y son este grupo de amigos los que me han hecho ratificar todos mis pensamientos al respecto de la amistad.

El pasado fin de semana recibí la visita de algunos de esos amigos que podríamos denominar de los de toda la vida (aunque alguno de ellos se ha ido añadiendo en etapas posteriores a la infancia, y por suerte, se ha quedado). La escusa perfecta era organizar una comida en mi recién estrenada casa. Algo típico de la tierra como plato principal (para hacernos sentir más en nuestra tierra), un buen vino y unas buenas cervezas sobre un mantel en el que reinaban diferentes temas de nuestras vidas. Y de postre, unas copillas para hacer más entusiasta la sobremesa, con un repaso generalizado a todas nuestras inquietudes, nuestras aficiones y nuestros problemillas (porque los problemas, rodeados de los que te quieren y quieres, son menos problemas).

Es en ese momento, donde te hace darte cuenta de lo que es la amistad realmente. Se te olvida si a veces te sientes solo o no en el lugar del mundo donde te encuentras viviendo. La palabra amistad alcanza su máxima dimensión porque puedes hablar de cosas que son del conocimiento de todos y en gran medida interesa a los “amigos de verdad”.

No todos los domingos se suelen hacer los kilómetros necesarios para ver a un amigo y pasar el día entero fuera de casa. Sacrificando cosas importantes como la familia, la novia, o simplemente el descanso necesario tras una noche de fiesta y la necesidad de cargar las pilas para poder empezar la semana en las mejores condiciones posibles.

Quería agradecer a todos aquellos amigos, qué en diferentes momentos han pasado por la película de mi vida, su amistad sincera. A los que se han quedado por el camino, porque sé de lo difícil de querer mantener contacto con todos ellos, pero la falta de tiempo, la pereza, la distancia,... hacen casi imposible tener un contacto fluido en el transcurrir del tiempo. A los que desde hace un tiempo dedican tiempo a leer mis divagaciones y además me sugieren temas. Y a los que se han quedado y hacen el esfuerzo por mantener viva esa amistad, darles un abrazo especial, y más aún a aquellos como los que en las últimas fechas están haciendo el esfuerzo de visitarme en casa pese a la distancia. Ellos hacen que alcance plenitud la palabra amistad.

Ojala siempre estuvieran cerca, o en su defecto, que se queden para siempre. Un abrazo a todos.

1 comentario:

  1. Amigo Antonio aquí te dejo un enlace de una entrevista tuya:http://www.fbclm.net/fbcm/paginas/campo%20atras/111203_antonio_rodriguez.htm

    ResponderEliminar