UN ROLLO: SATISFACCIONES INTERNAS.

¿Y POR QUÉ NO?

En la vida nos pasan cosas que no conseguimos entender por mucho que las pensemos. De ellas, las hay que son ingratas y también las hay que son muy gratificantes.

El paso del tiempo, dicen los sabios, que ayuda a entender la vida con perspectiva; o también los hay que dicen que: el tiempo pone a cada uno en su sitio, y ello facilita la comprensión de lo que aparentemente no tiene sentido o es incomprensible a la razón humana.

A medida que vamos cumpliendo años y dejando cosas atrás, a veces nos paramos a contemplar de una forma más relajada todo lo que nos ha llevado al punto en el que nos hallamos.



Esto implica un ejercicio de reflexión y rigor analítico para poder sacar conclusiones y saborear pequeños momentos que ayudan a entender la vida desde una perspectiva muy personal, casi ilógica si se contempla desde fuera. Lo importante, a fin de cuentas, es estar atento, receptivo y sobre todo, positivo para poder extraer lo mejor de cada acontecimiento que nos ocurre.

De todas formas, por muy satisfecho que estemos con ciertas situaciones, acontecimientos o consecuencias de nuestro quehacer, siempre seguirán existiendo cosas que no llegaremos a entender... Aunque nos queda la esperanza de poder llegar a comprenderlo con el paso de otro periodo de tiempo que me de perspectiva, y una visión diferente del hecho que en ese instante pasado, o presente, no pudimos asimilar como algo normal.

NO, NO ESTÁ LOCO, simplemente no puede dar voz a sus pensamientos. Es una cuestión de etica y moral. Se lo han prohibido.